Monterrey, Nuevo León (27 marzo 2017).- El presidente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, adquirió 18 concesiones de taxis en Nuevo León entre el 2005 y el 2008 reportando oficialmente vivir en la Colonia Lagrange de San Nicolás.
El acreditar la residencia en Nuevo León es un requisito fundamental que establece la ley estatal para acceder a estos permisos.
Sin embargo, durante los mismos años en los que reportó vivir en una de las zonas más modestas de San Nicolás -en una casa que no ha sido de su propiedad-, el ahora presidente del tricolor vivió en Líbano y luego regresó al País para ejercer cargos en la Ciudad de México, de acuerdo con el currículum de Ochoa y testimonios de allegados.
Incluso, en el 2006 trabajó en la Ciudad de México como secretario particular de María del Carmen Alanís, magistrada en el Tribunal Electoral Federal (Trife).
Y en el 2007, el político entró al Trife cuando Alanís asumió la presidencia del organismo.
A la vez que trabajaba en la Capital del País, Ochoa tramitaba los taxis en Nuevo León, entregando a la Administración del ex Gobernador priista Natividad González Parás un recibo telefónico a su nombre como comprobante de su supuesta residencia en la casa ubicada en la calle Don Juan número 407, en la Colonia Lagrange.
La Ley de Transporte para la Movilidad Sustentable de Nuevo León en su Artículo 66 exige ser mexicano y vivir en Nuevo León para poder obtener concesiones de taxi.
De lo contrario, el solicitante no podría acceder al permiso.
La ley también obliga a las personas físicas a presentar un acta de nacimiento original expedida por el Registro Civil y una constancia del municipio para avalar la residencia estatal.
Pero Ochoa sólo entregó un recibo telefónico y su pasaporte, expedido en la Ciudad de México, para comprobar que vivía en San Nicolás, según documentos oficiales.
Los 18 trámites fueron realizados por poder, a través de Francisco Flores Candia, que firmó, entre otras, la concesión 18738 tramitada en octubre del 2005 y autorizada en abril del 2007.
Fuentes oficiales señalaron que para el trámite se requiere la presencia del titular para anexar una fotografía actualizada en el documento.
En el caso del priista, la Agencia Estatal del Transporte usó una misma foto en los 18 documentos, pese a que se tramitaron en diferentes años.
Tras una búsqueda en internet, la única referencia a que Ochoa tuvo una actividad profesional en Nuevo León señala que dio una Maestría en Derecho Procesal Constitucional Electoral en la UANL, después del 2005, pero sin más detalle.
Sobre la casa, según registros oficiales, la vivienda de la Colonia Lagrange nunca ha pertenecido a Ochoa.
Entre 1984 y el 2014, el propietario fue Gilberto Mario Izaguirre Estrada. En internet aparece una persona con ese nombre y se identifica como “abogado y gestor”.
Los trámites para los taxis señalan que Ochoa vivió en esa casa desde el 2005 y al menos hasta al 2008, periodo en el que obtuvo las 18 concesiones.
No obstante, ningún vecino pudo identificar a Ochoa.
Los propietarios originales, hasta 1984, fueron un matrimonio de apellido Garza Pérez.
Del 2014 a la fecha, según información oficial, el domicilio le pertenece a un denominado Sindicato Industrial de Trabajadores. Pero al ser visitada, la vivienda luce como una más, sin ningún logo visible. La colonia está en uno de los sectores más populares.
Las concesiones están valuadas en su conjunto en casi 5 millones de pesos en el “mercado negro”, esto sin contar los 18 vehículos para taxis, cuyo costo supera los 2 millones de pesos.
Amigos del líder priista en la Ciudad de México aseguraron este fin de semana que, entre el 2004 y principios del 2005, Ochoa vivió en Líbano, luego de estudiar cuatro años en Nueva York, mientras que en el 2006 y el 2007 trabajó en el Trife.
El currículum de Ochoa, que está en el portal del PRI, confirma algunos de estos episodios profesionales, aunque no da muchos detalles.
El pasado 23 de marzo, cuando REFORMA dio a conocer las concesiones del político, el Gobernador Jaime Rodríguez acusó a Ochoa de ser “delincuente” por adquirir los taxis de manera irregular.
El priista respondió con un comunicado, calificando al Gobernador de “ignorante” por no saber que sí podía adquirirlos.
Al defender sus permisos, Ochoa nunca refirió que los adquirió viviendo en Nuevo León.
Además de las concesiones de Ochoa, su hermano Pedro Pablo compró tres taxis en el 2010 por cesión de derechos, registrando vivir en la Colonia Hacienda Santa Clara, en Monterrey, donde nadie lo conoce.
