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Raúl Hernández Moreno
Mayo 31
Rosa María Alvarado, Jaime Emilio Gutiérrez y Elsa Tamez fueron de gran apoyo a la campaña de Héctor Canales, al grado de que hay quienes sostienen que los dos primeros habrán de sacar más votos que el propio candidato a la presidencia municipal.
Con la experiencia de haber sido regidora, diputada, dirigente del OMPRI, ser agente aduanal y tener varios años de ser benefactora de los grupos socialmente vulnerables, Rosa María no tuvo dificultades en su campaña. Se movió como pez en el agua, visitó sectores en dos ocasiones, por lo menos. Fue, además, la más crítica con el PAN y el gobierno municipal, como debe ser todo opositor.
Y en el caso de Jaime Emilio, fue un candidato atípico, por no ser político. Pero además, ser doctor de profesión le dio un plus a su campaña. Mucha gente se le acercó para conocerlo y más de uno aprovecho para consultarlo sobre alguna dolencia. En la frontera chica, trabajo de la mano con cinco candidatas a la presidencia municipal. Y como la frontera suele ser priista – incluso cuando perdió Miguel Alemán y Mier, el PRI obtuvo más votos en los cinco municipios—esto le permite llegar a la elección con confianza.
Por su parte, Elsa Tamez es conocida por un gran porcentaje de la población por el trabajo que desarrollo cuando fue Presidenta del Sistema DIF, lo cual le permitió que ocho años después de haber dejado el cargo, siga siendo muy estimada en la sociedad.
Así como los candidatos a diputados le dieron un plus a la campaña de Héctor Canales, mención aparte, merece su compañera de vida. Zaira Rodríguez. Fue la principal promotora de su marido. Con su sencillez se ganó a la gente con la cual tuvo contacto a lo largo de la campaña.
Pocas veces las consortes de los candidatos se involucran en la campaña. Su actuación no suele ir más allá que acompañar al marido a los mítines y reuniones políticas. Zaira, en cambió, promovió muy bien a Héctor y se ganó a grupos tan difíciles como las educadoras.
Héctor Canales fue el candidato más arropado por sus compañeros de fórmula.
A Enrique Rivas, en cambio, sus candidatos a diputados lejos de ayudarle le estorbaron. En plana campaña, Carlos de Anda y Brenda Cárdenas se vieron involucrados en denuncias penales. Por su parte, del trabajo de Glafiro Salinas, solo él y sus colaboradores lo saben. Se perdió en la campaña.
Enrique Rivas hizo su propia campaña y será él quien arrastre votos a los candidatos a diputados. Fue él, su campaña, quien convenció a grupos como el sindicato del Imss, Arturo López de la Barra de Abogados, a Antioco Méndez y a la sección 2 del Sindicato de Alijadores, para que se sumaran a su proyecto. Serán muchos o serán pocos, pero Rivas los sumó y en una campaña todos los votos valen.
Hace cuatro años, en Tamaulipas la señora Josefina Vázquez obtuvo 597 mil votos y la mancuerna Francisco Cabeza de Vaca-Maki Ortiz, 549 mil, lo que confirma la importancia de tener nombres que arrastren votos.
